¿Cuánto cuesta un proceso judicial?
¿Cuánto cuesta un proceso judicial?
El caso de Ted Bundy. Este caso es uno de los más conocidos a nivel mundial, pero pocos conocen el costo que significó para el Estado el proceso judicial de este asesino.
Ted Bundy marcó un oscuro hito en la historia, luego de ser declarado culpable del asesinato de varias mujeres durante los años 70. Este asesino cometió crímenes terribles que burlaron a las autoridades y aterrorizaron a la población estadounidense.
Este asesino se veía como un hombre normal, demostrando la inteligencia y coherencia suficientes para jugar con la narrativa y moverla a su favor.
Este maestro de la manipulación se transformo en un verdadero problema para el sistema judicial, ya que logró convencer a miles de personas (incluyendo gente del juzgado) de que era completamente inocente de los cargos que se le estaban imputando.
Y aunque al final fue condenado a pena de muerte, la historia del carismático asesino que se defendió a sí mismo en la corte fue y sigue siendo un circo mediático, tras hacer de su proceso judicial toda una polémica.
Ted Bundy representó un verdadero coste de trabajo y dinero para el Estado. Aunque la cifra que se empleó para dar fin a su vida en la silla eléctrica, sea uno de los temas menos populares en torno a este caso.
¿Cuánto cuesta un proceso judicial con pena de muerte?
La pena de muerte es una medida judicial bastante controversial, y no solo por temas morales. Ya que en la práctica se demostró que suele ser mucho más costosa que la misma cadena perpetua. Cosa que la hace menos útil en términos estatales y más complicada debido al proceso legal que involucra.
En La mayoría de los estados de EE. UU., que aún mantienen vigente la pena de muerte, pocas veces la aplican en sus casos judiciales (la toman como una medida extrema). Porque es un proceso mucho más delicado, por ser considerado que vulnera los derechos humanos.
Se ha llegado a sostener que los casos de pena de muerte son en promedio cuatro veces más costosos para la Fiscalía que un proceso por homicidio sin pena capital, debido a lo largo que se hace el proceso.
En el caso de Ted Bundy, sus fugas y manipulaciones alargaron el proceso más de lo usual. Por lo que representó un coste elevado por la ejecución de este asesino.
¿Qué gastos se contemplan en estos procesos?
Como costos generales de un despacho judicial, corresponden los recursos operativos que requiere el juzgado para atender la demanda de justicia.
Esto engloba desde el primer momento que se tiene conocimiento de un hecho punible en lo penal o de la presentación de la demanda en las otras áreas de atención, hasta el archivo definitivo del expediente.
Incluye los costos de los servidores del despacho y los gastos generales en que incurre el despacho para cubrir servicios públicos, arrendamiento, mantenimiento, aseo, vigilancia y materiales (papel, cinta, borradores, pita, tinta, ganchos).
Si las instalaciones donde opera el juzgado son del Estado, se hace un estimativo de depreciación con base al área ocupada. Adicionalmente, se incluye el cálculo por depreciación de los equipos asignados a cada juzgado.
Algunos costes que genera la representación por el Estado, son:
- Servicios personales de entidades judiciales (sueldos, prestaciones, transferencias de nómina): A la Fiscalía, Oficina de asignaciones y reparto, Despacho judicial, Tribunal Superior y la Corte Suprema de Justicia.
- Servicios personales otras entidades: Policía metropolitana, Procuraduría, Medicina legal.
- Gastos generales asignados al proceso.
- Costo indirecto asignado al proceso.
Pero la pena de muerte aumenta todos estos costos, por lo que en algunas de las ejecuciones más mediáticas el Estado ha debido gastar miles de dólares para terminar el proceso.
Para ejemplificar se puede mencionar el caso de Cal Brown, ya que su muerte representó un gasto para Washington de un total de $97.814.
Así mismo, la ejecución de Robert Coe le costó al estado de Tennessee un total de $11.668. Estas cifras totales contemplan los suministros médicos, personal y las drogas utilizadas en el proceso.
En el caso Ted Bundy, el estado de Florida gastó 6 millones de dólares para ejecutarlo en la silla eléctrica el 24 de enero de 1989. Luego de su muerte, le extrajeron el cerebro en busca de anomalías que pudieran incidir en su comportamiento criminal, pero lo cierto es que concluyeron que era un cerebro normal y sano.
Este caso es, por lejos, uno de los más estudiados en la criminología y seguramente un caso a analizar en los programas de Máster Universitarios en Neurocriminología y Psicopatología Criminal.
¿Cómo fue el proceso judicial de Ted Bundy?
Este famoso asesino fue encontrado sospechoso desde que se realizó un registro a su coche, ya que fueron encontrados diversos objetos que evidenciaron que estaba involucrado en el intento de homicidio de una de sus víctimas (Carol).
Su juicio por secuestro con agravantes, inició El 23 de febrero de 1976. En este, Carol DaRonch hizo parte de la declaración en su contra, dejando a Bundy en una situación vulnerable que lo llevó a llorar y negar los cargos. Sin embargo, fue sentenciado a quince años de cárcel con posibilidad de libertad condicional.
Tras una serie de pruebas psicológicas que se hicieron mientras se encontraba prisionero, además de demostrarse que su problema era la fuerte dependencia que tenía de las mujeres y su temor a ser humillado por ellas.
Bundy se preparó para un nuevo proceso en 1977 cuando fue enviado al condado de Garfield, pero en esta ciudad logró escapar de la policía.
Durante varios días estuvo desaparecido, fue hallado y volvió a darse a la fuga. Mientras que las autoridades intentaban encontrarlo, este continuó asesinando a mujeres en Florida, para un total de 7 mujeres agredidas.
Finalmente, fue detenido en febrero de 1978, cuando la policía paró su coche por rutina. Las pruebas que se aportaron durante el primer juicio fueron determinantes, a pesar del apoyo que tenía Bundy. Los moldes dentales, las fotografías, los indicios y los testimonios lo relacionaron con varios casos de asesinato.
Los juicios de Ted Bundy
Bundy se encontró culpable en el juicio del asesinato de Lisa Levy y luego el de Margaret Bowman en 1978. El segundo proceso judicial fue llevado a cabo en 1980, donde fue hallado culpable del asesinato de Kimberly Leach. Esa vez, sus abogados intentaron apelar a la incapacidad mental, pero fue en vano.
La fecha de su ejecución fue el 24 de enero de 1989 y antes de iniciar el proceso, Bundy decidió confesar todos sus crímenes. Dando cierre así, a este mediático caso.
Los años de juicio y fuga de Bundy generaron grandes pérdidas para el sistema judicial estadounidense, siendo uno de los más sonados por lo caro que resultó para el Estado.
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