La inmigración en Europa ha sido un tema preocupante, especialmente desde el año 2015, cuando se produjo una llegada masiva de migrantes y refugiados en situación irregular a la Unión Europea. Esto significó una respuesta de la UE en varios niveles, tanto para los inmigrantes y refugiados, como para la seguridad fronteriza y de los países receptores de ellos.
Generalmente se piensa, bien o mal, que los inmigrantes son personas peligrosas o que están huyendo de sus países de origen por problemas de delincuencia, seguramente hay de todo entre ellos, incluso terroristas, pero la mayoría son familias, que han escapado de sus países de origen por causa de la guerra y sus consecuencias.
Inmigración en Europa, conceptos y su historia
En términos generales, se podría decir que se considera “migrante” a cualquier persona que emigra desde su país de origen hacia la Unión Europea (UE).
Dentro de este grupo de personas inmigrantes, hay distintas categorías como, solicitantes de asilo, refugiados y beneficiarios de protección subsidiaria a inmigrantes en situación irregular y regular.
La masiva inmigración a Europa, fue consecuencia de las personas que huyeron de la guerra en Siria, en el año 2015, ya que fue una cantidad sin precedentes de inmigrantes que llegaron al continente europeo. Esto significó tomar medidas en varios aspectos.
La primera medida a tomar fue referente a las políticas de gestión de la inmigración regular e irregular y la segunda medida fue la que se refiere a las normas comunes de asilo en toda Europa.
La llegada de inmigrantes también a dado lugar a la necesidad de acciones y reformas adicionales para garantizar la seguridad fronteriza, además, una distribución más justa de los solicitantes de asilo entre los países de la UE.
Medidas aplicadas sobre la inmigración en Europa
Desde la crisis migratoria del año 2015, la UE ha venido aplicando medidas para controlar mejor las fronteras exteriores y los flujos migratorios. Debido a esto, las llegadas irregulares a la UE se han reducido en más del 90%.
Se han adoptado y se seguirán adoptando medidas para facilitar y regularizar la inmigración en Europa, tanto así, que están participando los dos Consejos, el Consejo Europeo y el Consejo de la Unión Europea.
Los Estados de la Unión Europea, se están esforzando por establecer una política europea de migración “eficaz, humanitaria y segura”. En esto, cumple un rol muy importante el Consejo Europeo, estableciendo las prioridades estratégicas.
Según estas prioridades, el Consejo de la Unión Europea determina las líneas de actuación y los mandatos para las negociaciones con países terceros. Además, adopta legislación y define programas específicos.
Los dos Consejos, durante estos años, han ejercido una respuesta enérgica a la presión migratoria.
Debido a esta crisis, tuvieron que actuar todas las entidades encargadas del tema de las migraciones, con mucha celeridad y eficacia, a pesar de eso se vieron sobrepasados en un momento, ya que son muchos los inmigrantes que entran a Europa en forma irregular y es imposible controlarlos a todos y tener un registro de ellos.
Incluso han aumentado los inmigrantes en Europa que entran en forma regular, ya sea pidiendo asilo o algún otro beneficio de solidaridad. Lamentablemente no son todos aceptados, ya que los países son muy rigurosos en ese tema.
Son muchas las medidas y respuestas que se han dado para el problema de la inmigración en Europa, les dejamos un enlace aquí para que se puedan interiorizar del tema.
Debido a la inmigración irregular y a la petición de asilo, Bruselas promete mano dura, blindando las fronteras y devolviendo a los inmigrantes irregulares a cambio de un sistema obligatorio de reparto de los refugiados aspirantes a asilo, entre los Estados miembros. Ya que el sistema que se está utilizando fue aprobado en el año 1990 y ya no funcionaría. El organismo espera lograr un gran acuerdo de las partes.
Otra medida a tomar, será el reforzamiento de la vigilancia y se espera que con esto se reduzca el número de cruces irregulares fronterizos. Ya se redujeron las entradas irregulares en el año 2019, situándose en el nivel más bajo desde 2013.
La Agencia Europea de Fronteras, por primera vez en su historia, dispondrá de un cuerpo propio de vigilancia. El próximo mes ya estarán seleccionados los primeros 700 guardias.
Otro objetivo comunitario importante, es mejorar la política de expulsión de los inmigrantes llegados irregularmente y que no pueden acogerse a asilo. En todo caso, los Estados cada año ordenan la salida de medio millón de personas, lo que en la realidad se concreta en sólo 170.000 de esas órdenes.
El plan se completaría, con las cuotas de reparto o mecanismos de solidaridad entre los Estados. Esto ya se había planteado en plena migración en el año 2015, lo que fue un total fracaso. Incluso se había propuesto una multa de 250.000 euros por cada refugiado que se negaran a acoger.
Lo que espera Bruselas ahora, es una solidaridad obligatoria, pero de geometría variable. Alemania propone que se descuenten de la cuota de refugiados, el número de personas que han sido devueltas.
El tiempo dirá si todas estas medidas han sido eficaces y fructíferas.
Fuentes utilizadas en este artículo:
https://elpais.com/politica/2020/02/18/actualidad/1582046462_928811.html?rel=mas
https://www.europarl.europa.eu/news/es/headlines/society/20170629STO78632/migracion-en-europa
https://www.consilium.europa.eu/en/policies/migratory-pressures/history-migratory-pressures/
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