Los ladrones que llevan a cabo su labor con “éxito” tienen algo en común: dueños de vivienda que los invitan a robar sin darse ni cuenta y ellos, que son generosos, les dan las gracias dándoles estos consejos con un poco de sentido del humor:
- ¡Gracias por la escalera! La planta baja tenía rejas, pero la planta primera no, así que fue realmente sencillo trepar por la escalera y entrar. ¡Y tampoco había alarma de seguridad! ¡Todo perfecto, gracias! Si quieres mantenerme fuera, deja tu escalera en el garaje, dentro de casa o en un armario bien cerrado en el patio.
- ¡Me encantó tu basura! Gracias por avisar de que habías comprado nuevos gadgets, dejando las cajas de cartón de tú nuevo portátil y tu nueva televisión enteras, me han venido estupendamente. La próxima vez, rompe bien las cajas en pedazos y échalas en el contenedor de reciclaje de cartón.
- ¡Que árboles tan bonitos y frondosos tienes en casa! Gracias por no recortar las ramas que llegan hasta tu terraza y las habitaciones del piso superior, eso me ha ayudado a subir más fácilmente. Creo que deberías podar un poco esos árboles…
- Tu casa es mi casa. Tu puerta delantera de seguridad me impresionó pero decidí dar una vuelta y la trasera me alegró el día… Si quieres proteger tu casa, pon puertas exteriores de seguridad y además, ciérralas con llave, te las habías dejado abiertas.
- El jardín delator. Tu césped está tan alto y las hierbas tan felices que tuve claro que hace tiempo no andabas por casa. Deberías contratar a alguien para que cuide tu jardín de vez en cuando si te vas de viaje durante mucho tiempo.
- El dormitorio siempre tiene premio. Lo imaginaba, porque casi nunca falla pero al entrar, mis sospechas se hicieron realidad: Todos tus objetos de valor estaban en tu habitación. Deberías cambiarlos de habitación, instalar una caja fuerte en la pared o guardar los más preciados en una caja de seguridad en el banco.
- Querido amigo de un amigo. Gracias por avisarme a través de Facebook y Twitter que estabas pasando una fantástica semana de vacaciones en el Caribe. Eso me quitó mucha presión de encima y pude robar con total tranquilidad. La próxima vez deberías comentarlo a tu regreso.
- Mientras tú haces check-in en un restaurante, yo lo hago en tu casa. Gracias por ser tan considerado y avisarme siempre dónde estás. Deberías ser más prudente con el uso de la geolocalización.
- Me disfrazo con buen gusto. Si piensas que voy a tu casa a robar vestido de ladrón, te equivocas, casi siempre me visto de repartidor, jardinero, albañil, o de cualquiera que pueda llevar una carretilla y que a nadie le extrañe.
- Me gusta el ambiente romántico de tu jardín. Gracias por no tener apenas iluminación exterior. No me gusta que me vean tus vecinos. Deberías instalar alguna luz automática con sensor de movimiento.
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